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Semejanza


A mi padre



Cuando arda la razón en la frontera,
masticaré la hierba para callar las palabras
y seré esa sombra ahuecada que adopta mi ternura
en ese instante que el aire pierde su equilibro.
Seré el camino que  flota  en el azul que te cobija
y mis lágrimas, dolor de tus ojos
se  propagaran sobre la tumba,
mientras el pecho abriga la resonancia de tu voz.
Seré esa división del alma que se refleja en tu cielo
donde una flor duerme en el tiempo.
Seré ese segundo que oculta la media noche 
y desde lo alto
sellaré ese ángulo de nuestra semejanza,
donde los pájaros duermen y se vuelven invisibles.
Y allí,
en lo alto,
quedarán inmóvil para siempre  tus parpados en mi mirada,
que aprendió a volar con tus alas
que jamás dijeron no,
ni nunca

frente a mi futuro.

Publicada en el año 2014, conjuntamente con la ALP. 
En la colección "Locus amoenus"

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